MAPA EMPRESARIAL

Foment avista elecciones

La expulsión temporal de Cecot se produce a pocos meses de las elecciones en la patronal en las que Antoni Abad amaga con presentar su candidatura para relevar a Gay de Montellà

El presidente de Foment del Treball, Joaquim Gay de Montellà (izquierda), con el secretario general de esta patronal, Joan Pujol.

El presidente de Foment del Treball, Joaquim Gay de Montellà (izquierda), con el secretario general de esta patronal, Joan Pujol.

Olga Grau

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La ruptura largamente anunciada entre la patronal Foment y su socio Cecot se ha consumado finalmente esta semana con la expulsión de esta última de forma temporal. El conflicto entre la organización adherida a la CEOE, que hace de paraguas de las diferentes entidades sectoriales y territoriales en Catalunya, y la patronal de Terrassa se arrastra desde hace años y se ha recrudecido en los últimos meses al calor del 'procés' y de la proximidad a las elecciones en Foment.

Los puntos de fricción son básicamente tres. El primero se sitúa en el plano personal y obedece a una falta de sintonía absoluta entre Joaquim Gay de Montellà y Antoni Abad, presidentes de Foment y Cecot, respectivamente. Explican fuentes consultadas de ambas organizaciones que existe una rivalidad notoria entre los dos líderes patronales intensificada, en parte, por las aspiraciones de Abad a la presidencia de Foment expresadas públicamente en más de una ocasión.

El segundo punto de desencuentro se centra, según la versión de Foment, en el ansia de expansión territorial de Cecot, que estas fuentes definen de «agresiva», por crecer más allá de su territorio natural del Vallès y que se ha cristalizado en la apertura de una sede en Barcelona, en la captación de asociados en otras demarcaciones de Catalunya o en la celebración de su cena anual en la capital catalana. 

Larga disputa

Cecot asegura que su autonomía respecto a Foment se remonta a décadas, incluido el periodo en el que lideró la organización Eusebi Cima y en el que la institución creció de forma importante. Pero desde la cúpula de Foment se recela y se apunta a que Cecot está buscando configurarse como una patronal catalana que pueda competir con Foment en la representación empresarial con el apoyo político de un Govern de corte soberanista en la plaza Sant Jaume.

En esta dirección apunta el tercer aspecto conflictivo que es precisamente la dimensión política que desde Foment se ha querido ver en algunas actuaciones de Cecot. Entre estas se encontraría su integración en la Taula per la Democràcia, un colectivo creado tras la jornada de referéndum del 1-O en protesta por la actuación policial en aquella jornada y que convocó un paro de país el día 3 de octubre, al que no se sumó Foment. También molestó la carta que envió Cecot al ministro de Economía, Luís de Guindos, en la que expresaba su oposición al decreto aprobado en octubre que facilitaba a las empresas el cambio de sede. 

Las alegaciones de Cecot, que defienden que no se ha saltado los estatutos de Foment, no han sido suficientes para evitar su expulsión con el voto a favor de 26 representantes, con el de 12 en contra y 8 abstenciones. Una decisión que deberá ahora ratificar la asamblea. La junta directiva del pasado lunes fue tensa y finalizó con la propuesta de castigo expresada por  Gay de Montellà, quien aseguró literalmente que prefería quedar «como el malo» y que fuera el siguiente presidente de Foment el que se entienda con Abad. 

Elecciones

Pero a a pesar de la expulsión, el presidente de Cecot baraja presentarse como candidato a dirigir Foment a través del gremio del metal de Terrassa en las elecciones que se celebrarán el próximo diciembre. La carrera para relevar a Gay de Montellà ya está en marcha y la organización vuelve la mirada a la búsqueda de candidatos de consenso hacia dos de los actuales vicepresidentes de la junta directiva, el economista Ramon Adell y el presidente de la aseguradora catalana Fiatc, Joan Castells. Este último mantiene una relación cercana con Gay de Montellà, quien a su vez es consejero de la aseguradora catalana desde mayo del 2014. Las elecciones de Foment coincidirán en el tiempo con las de la CEOE, donde la carrera sucesoria para relevar a Juan Rosell, mentor de Gay de Montellà, también ha empezado y promete ser movida.