Los nuevos jubilados: el 50% se retiró de forma anticipada

A muchos les sorprende por qué en España no tienen éxito las formulas extendidas en otros países europeos de combinar la jubilación con la actividad laboral o prolongar la vida de activo. Son muchas las razones (salarios recortados al final de la carrera laboral, escaso interés de las empresas por los veteranos frente a los baratos contratos para jóvenes, pocos incentivos a seguir trabajando, entre otras) para que ello suceda, pero se entienden los recelos a tenor de los resultados del estudio de VidaCaixa presentado en Madrid: el 84% de los jubilados se siente libre para dedicarse a lo que más le interesa y solo el 1% opta por la jubilación activa. 

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El perfil del nuevo jubilado ha cambiado mucho. Están conectados a los nuevos dispositivos tecnológicos, vienen de largas carreras profesionales y se encuentran bien de salud. Y han dejado de ser activos en edad temprana porque antes de la crisis las empresas ofrecían buenas retribuciones a los mayores de 55 años para dejar el puesto de trabajo. 

El estudio presentado por Tomás Muniesa, vicepresidente ejecutivo y consejero delegado de VidaCaixa, Jaume Giró, director general de la Fundación La Caixa; y Enric Fernández, director corporativo de planificación estratégica y estudios de CaixaBank, señala que el jubilado medio se retiró hace ocho años,  al cumplir los 62 años y medio.

La última reforma de pensiones retrasó la jubilación  a los 65 años y actualmente la edad media de los nuevos jubilados es de 64 años.

Retiro anticipado

En las 1.200 encuestas realizadas destaca que el 44% de quienes hoy están en situación de retiro dejó de trabajar al cumplir 65 años. Sin embargo son más, el 50%, los que se jubilaron de forma anticipada, la mitad por razones de salud o por decisión de la empresa.

Aunque la mayoría sabía que anticipar el retiro suponía una rebaja de la pensión, el 44% desconoce que existen bonificaciones por retrasar la edad de jubilación. El 73% asegura que sabía exactamente lo que cobraría antes de jubilarse.

Los impulsores del estudio ponen el acento en la importancia de que los ciudadanos se informen cuanto antes de en qué condiciones quedará su renta cuando se jubilen ya que, señalan, los españoles no se empiezan a preocupar de este asunto hasta los 55 o 60 años cuando los planes privados tienen poco recorrido.

La media de ingresos mensuales en el hogar de un jubilado o jubilada es de 1.758 euros. Un 32% se sitúa en el tramo superior, percibiendo más de 2.000 euros al mes, mientras que el 18% dispone de 1.000 euros o menos. En el 50% de los casos solo una persona en el hogar es quien aporta la totalidad de esos ingresos.

En todo caso, estas cuantías son muy superiores a la pensión media de los jubilados en el pasado mes de octubre, que fue de 963,50 euros, según datos de la Seguridad Social.

Para la inmensa mayoría el ingreso principal es la pensión, aunque el 12% recibe más de una renta pública (la de viudedad es la más habitual) y el 58% tienen  además un plan de pensiones privado. Al jubilarse, el 37% decidió rescatarlo todo de una vez, mientras que el 54% percibe este ahorro como una renta periódica.

Las mujeres y hombres pensionistas puestos bajo la lupa de la VidaCaixa no tienen actitudes diferentes ante el retiro, pero sí en sus condiciones de vida. En general, las mujeres se encuentran en peor situación económica ya que sus salarios como activos fueron mas bajos que los de los hombres.