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Colau aplaza los relevos en Fira de Barcelona hasta que haya nuevo Govern

SMART CITY EXPO Colau y el presidente de Seat, Luca di Melo, ayer.

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Salvador Sabrià

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El relevo en la presidencia del consejo de administración de Fira de Barcelona y de la mayoría de sus consejeros (cinco de nueve) deberá esperar hasta el año que viene. Josep Lluís Bonet, el segundo presidente del consejo de administración desde que se creó esta figura, y que ya ha agotado todos sus mandatos en el cargo, cumple su último plazo el próximo diciembre y debería ser relevado en la primera reunión del Consell General de Fira, prevista precisamente para la segunda mitad de ese mes.  

Pero la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en su calidad de presidenta del Consell General de Fira de Barcelona, ha anunciado a la Cambra de Comerç de Barcelona, una de las otras dos instituciones que forman parte de este organismo junto a la Generalitat de Catalunya, que no realizará la convocatoria hasta que se haya formado el nuevo Govern emanado del resultado de las elecciones al Parlament del próximo 21 de diciembre, según fuentes municipales. A la vista de esta decisión, Bonet y el resto de consejeros que están a punto de cumplir su mandato permanecerán en el cargo al menos hasta el próximo febrero.

La decisión de Colau, anunciada de forma informal hace unos días al presidente de la Cambra y de manera más oficial en las últimas horas, choca con la actitud del presidente cameral, Miquel Valls, que ha convocado un pleno extraordinario para el próximo jueves 23 con un único punto del orden día: la ratificación de los cinco nuevos consejeros de Fira que propondrá la Cambra. Los nombres que han sonado como posibles consejeros para la Fira son Kim Faura (Telefónica), Helena Guardans (Sellbytel), Mar Alarcón (Social Car), Manuel Vallet (Hoteles Catalonia) y Pau Relat (Mat Hólding). Los dos primeros han sido presentados en algunos medios como los posibles candidatos a la presidencia. Hasta este jueves por la tarde, el pleno se mantenía.

De acuerdo con los estatutos de Fira de Barcelona, el nombre de los consejeros los propone la Cambra de Comerç, y el de presidente del consejo queda en manos del presidente cameral. Pero en todo caso deben haber sido consensuados previamente con el Ayuntamiento de Barcelona y la Generalitat. Valls considera que tiene el acuerdo tácito del Govern para los nombres que propone, pero fuentes municipales niegan este extremo.

Artículo 155

Colau, además, no quiere convocar un consell general de Fira en el que la representación de la Generalitat corra a cargo de una delegación del Gobierno central, como sucedería en diciembre, dada la vigencia del artículo 155. Fuentes municipales añaden que de no retrasar el consell, podría darse el caso de que en la decisión de un cargo de tanto peso institucional y representativo como el de presidente de la Fira y con vigencia para cuatro años, ampliable a ocho, no pudiese decir nada el Govern elegido en las urnas, que podría ser muy diferente al cesado. 

"Promover unos consejeros, de los que podría salir el futuro presidente de Fira, sin tener cerrado el acuerdo entre las tres instituciones es hacer un flaco favor a los afectados y a la propia institución", advertían desde el Ayuntamiento de Barcelona. 

Récord de facturación

La Fira pasa por uno de sus mejores momentos de su historia. Según explicó el pasado miércoles Josep Lluís Bonet, cerrará este ejercicio con un récord de facturación, 165 millones, y la previsión para el 2018 es mejorarlo, a la vista de las contrataciones ya hechas de los grandes salones como Alimentaria, Hispack o el Mobile World Congress.