Bankia prevé que Catalunya se normalizará "en las próximas semanas"

El último giro de los acontecimientos políticos en Catalunya, tras la aplicación del artículo 155 y la convocatoria anticipada de elecciones autonómicas, parece haber sido recibido con alivio, al menos, entre algunos agentes de la economía española. “Vemos un proceso de normalización más acelerado de lo que lo veíamos hace una semana” ha dicho el consejero delegado de Bankia, José Sevilla, este lunes durante la presentación de resultados trimestrales de la entidad. 

“Si la vuelta a la normalidad es rápida, el impacto sobre la economía española probablemente será moderado” ha dicho Sevilla, sin querer cuantificar aun el efecto que en todo caso -ha dicho- sí se producirá. “No tenemos aún un número. Queremos tener más información”, ha dicho; pero se ha mostrado confiado en que el clima político “se va a normalizar en las próximas semanas”

Privatización retrasada

En todo caso, según ha explicado el número dos de Bankia, los acontecimientos políticos en Catalunya ya han tenido consecuencias sobre la entidad pública, tanto sobre el proceso de privatización como sobre la evolución del negocio.

Por una parte, se ha visto retrasada la decisión anunciada por el ministro de Economía, Luis de Guindos, de privatizar un nuevo paquete de la entidad. “Los eventos han influido en el mercado, muy volátil”, ha dicho Sevilla al respecto.

El consejero delegado de la entidad pública, no obstante, ha subrayado que “a lo largo del mes en curso (en alusión a noviembre) o antes de que finalice el año se pueden producir esas ventanas” de oportunidad para ofrecer a los mercados un nuevo paquete privatizador de Bankia. 

Ganancia de depósitos

Por otra parte, el clima político en Catalunya ha beneficiado a Bankia en forma de una mayor afluencia de depósitos de clientes catalanes que en un primer momento optaron por dase en La Caixa y Banc Sabadell, antes del traslado de sede social de las dos entidades catalanas. Sevilla ha rehusado cifrar este movimiento. “Queremos ganar clientes, pero queremos hacerlo en buena lid”, ha dicho.

“Nuestra gente sufrió mucho en el 2012 por el acoso de la competencia”, ha recordado Sevilla en alusión a la fuga de depósitos y de clientes que tuvo que encajar la entidad cuando su rescate; “pero nosotros no queremos utilizar los problemas de un competidor como arma competitiva”, ha dicho, para negar su participación en una hipotética “guerra comercial”. La actitud del banco -ha dicho- ha sido "leal y constructiva, ayudando a normalizar las cosas y quitando miedo a los clientes".

En estas últimas semanas, Bankia  ha debido atender las demandas de algunos de sus propios clientes de trasladar sus ahorros a otras oficinas fuera la comunidad catalana. También se ha notado en Catalunya, según Sevilla, una menor demanda de créditos para el consumo; no así en las hipotecas, que, según ha dicho, han seguido su curso con normalidad.