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Un exalto cargo de Rabat, detenido por apropiación de relojes

Relojes de lujo expuestos en la joyería Rabat del paseo de Gràcia en Barcelona

Relojes de lujo expuestos en la joyería Rabat del paseo de Gràcia en Barcelona / periodico

Salvador Sabrià / Barcelona

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El exdirector de tienda de la joyería Rabat en el paseo de Gràcia 94 de Barcelona, Jordi Ortiz, fue detenido por los Mossos d’Esquadra el pasado 9 de agosto en L’Escala, a causa de una denuncia de la empresa en la que se le acusa de un presunto delito de apropiación indebida y estafa. Rabat acusa a su exalto directivo (trabajaba en la empresa desde hacía más de 20 años) de haber sustraído al menos 4 relojes con un precio de venta de casi 800.000 euros, que podrían llegar a ser 77 piezas por un importe conjunto de cerca de tres millones. 

Ortiz quedó en libertad el pasado fin de semana en calidad de investigado después de declarar en un juzgado de Figueres. Se le ha abierto una causa por el presunto delito de apropiación indebida, con carácter agravado, dada la cuantía del material desaparecido. Y se le han impuesto medidas cautelares como la obligación de presentarse ante la policía dos veces al mes, la retirada del pasaporte y la prohibición de salir del territorio, según fuentes oficiales del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya

Los Mossos investigan también un posible delito de blanqueo de capitales, ya que según la denuncia, los relojes se compraron en efectivo. Y, además, según la versión del acusado ante la policía, no se trata de ninguna sustracción sino que la desaparición de las piezas era conocida por la empresa y responde a una presunta operativa de blanqueo de capitales habitual en la compañía.

Descuadres de inventario

En la denuncia de Rabat contra Ortiz, con fecha del pasado 2 de agosto, se explica que la empresa detectó durante este año algunos descuadres de inventario en la tienda de paseo de Gràcia 94 de Barcelona. Posteriormente comprobó que al menos faltaban cuatro piezas de la marca Richard Mille, con un valor conjunto de venta al público de casi 800.000 euros. Tras varias indagaciones, los propietarios de Rabat llegaron a la conclusión de que esas piezas y otras las podría haber vendido por su cuenta el director de tienda, sin cumplir los protocolos de control de la compañía, “en un mercado paralelo de piezas por parte del denunciado en connivencia con terceros fuera del control de la joyería para la que prestaba sus servicios”, según el texto de la denuncia.

En el mismo escrito se afirma que  Ortiz no entregó ni las piezas ni el dinero de su presunta venta y fue despedido, además de notificársele que la compañía lo denunciaría. A partir de esta denuncia, Ortiz fue detenido el pasado 9 de agosto. 

Sin embargo, en una declaración realizada ante la policía una vez ya en condición de detenido y ratificada después ante el juez, Ortiz dio otra versión de lo ocurrido. Según el exdirector de tienda, si los inventarios no cuadran es porque en la joyería se sigue una operativa que podría ser considerada de blanqueo de capitales y que funciona de la siguiente manera, en palabras de Ortiz: “El cliente ‘X’ acude a la tienda, elige un reloj, se lo lleva y lo paga en efectivo…posteriormente se espera al cliente ‘Y’ para poder facturarle el reloj, por este motivo existen desfases temporales entre el inventario en papel y las existencias reales en tienda”. El cliente ‘Y’, que es extranjero, lo que permite a la empresa recuperar parte del IVA, según Ortiz, obtiene a cambio un trato privilegiado y descuentos adicionales. 

El exdirector de tienda añadió que los clientes ‘Y’ eran proporcionados por “conseguidores” que se dedican a la compraventa de relojes. Ortiz añadió que esta operativa no solo la realizaba él, sino otros empleados a su cargo y los de otras joyerías del grupo. 

Fuentes de Rabat rebaten la versión de Ortiz recalcando que precisamente fue la empresa la que presentó la denuncia y que los hechos son simplemente que sorprendieron a  una persona de confianza en un delito flagrante. Respecto a la investigación paralela abierta por blanqueo de capitales, la joyería la considera lógica teniendo en cuenta que las piezas desaparecidas presuntamente se vendieron al contado, según la misma denuncia. 

No es la primera vez que Rabat sale relacionada con temas de blanqueo. Fuentes de la joyería recalcan que la compañía, dada su actividad, “permanentemente está sometida a todo tipo de investigaciones y jamás ha sido condenada por nada, porque siempre ha cumplido estrictamente la legalidad”. En todo caso, los Mossos han iniciado una investigación para corroborar si las declaraciones de Ortiz responden a la realidad o son solo una estrategia de defensa.