AUTOMOCIÓN

El cambio del Audi Q3 por el A1 en Martorell amenaza 700 empleos

Producción del Q3 en Martorell.

Producción del Q3 en Martorell.

ANTONI FUENTES / BARCELONA

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La dirección de Seat ha confirmado por fin un secreto a voces con dos caras de la moneda. La planta de Martorell asumirá a partir del 2018 la producción del utilitario Audi A1 pero perderá la del exitoso Q3, que se trasladará a Hungría. El trueque de un modelo por otro puede poner en peligro unos 700 empleos, según los sindicatos. 

La compañía ha presentado la adjudicación del A1, cuyo anuncio fue abortado por Seat en julio pasado después de colgar durante unas horas una hoja informativa interna, como una noticia positiva para Martorell porque supondrá un aumento de volumen que permitirá incrementar la plantilla. Sin embargo, el presidente del comité y dirigente de UGTMatías Carnero, ha advertido de que la fábrica saldrá perdiendo con el cambio del A1 por el Q3 porque el utilitario requiere menos horas de trabajo y por tanto menos plantilla que el todocamino.

El comité, del que forman parte UGT, CCOO STS-USOC, ya ha enviado una carta a sus colegas del sindicato IG Metall en la sede central del grupo en Wolfsburg para que pregunten al consejo de administración "cómo piensan amortiguar el exceso de plantilla que se producirá" al bajar la carga de trabajo. El ensamblaje del A1 requiere 17 horas de trabajo frente a las 28 del Q3. La planta de Bruselas, en la que se produce ahora el A1 en exclusiva, tiene una plantilla de 2.528 trabajadores frente a unos 1.500 que intervienen en la línea de montaje del Q3 y varios centenares en las tareas derivadas como la pintura. 

NEGOCIACIÓN LABORAL

Para Carnero, la única solución para solventar el excedente de plantilla es asignar a Martorell la producción de otro modelo adicional, para lo que el sindicalista se ha mostrado abierto a negociar un acuerdo de competitividad que ve compatible con la mejora del poder adquisitivo en el convenio que se ha empezado a negociar. El responsable de CCOO en Seat, Rafael Guerrero, ha defendido que el nuevo convenio colectivo incluya un plan industrial de futuro que garantice la carga de trabajo y de empleo con la asignación de un nuevo modelo, preferiblemente de la marca Seat. De hecho, la decisión del consorcio deja Martorell sin la producción de ningún SUV en un momento en que el segmento de los todocaminos es el que crece más y en el que Seat sacará al mercado antes del próximo verano su primer modelo, que se produce en la República Checa.

La ganadora en el cambio es, para el comité, la planta húngara de Györ, en la que ahora se ensamblan algunas versiones del Audi A3, S3 y TT. De rebote, la factoría del grupo en Bruselas perderá el A1, que evitó su cierre hace unos años, y sufrirá un cambio radical al especializarse en el nuevo todocamino eléctrico de Audi y en la fabricación de baterías. 

MÁS SINERGIAS

El presidente de AudiRupert Stadler, ha justificado la rotación de modelos para mejorar la eficiencia de producción con nuevas sinergias y "fortalecer las plantas involucradas", mientras se protegen los puestos de trabajo. El A1 compartirá plataforma modular con el Ibiza, para lo que Seat ha reformado la línea de montaje del modelo desde diciembre hasta esta semana. 

La confirmación de Seat ha llegado un día después de que el comité diera por seguro el cambio de modelos en Martorell y mostrara su preocupación. Para De Meo, la producción del A1 por parte Seat "es una magnífica noticia" que aportará a Martorell y a la marca "más volumen y más ingresos en los próximos años”. Seat ha destacado que el A1 "también conllevará inversiones y empleo a la planta" y contribuirá a conseguir "su plena capacidad de producción" después de alcanzar los 477.000 vehículos en el 2015. Los sindicatos apuntan que los 100 ingenieros que se han incorporado en los últimos meses al Centro Técnico de Martorell trabajan ya en el proyecto de la próxima generación del Audi A1. 

En la decisión de Volkswagen también han pesado, según el comité, los costes laborales de cada factoría, que van de los 12 euros la hora en Hungría a 37 euros en Bruselas pasando por 26 en Martorell. Además, los sindicatos consideran que el cambio de modelos entre factorías "va en contra del objetivo del grupo de reducir los gastos y las inversiones" para hacer frente a las consecuencias del escándalo de los motores trucados. 

El nuevo 'conseller' de Empresa, Jordi Baiget, ha elogiado la adjudicación del A1 dentro del plan de 3.300 millones de inversión hasta el 2019, que considera "una muestra de la confianza en Martorell y en la situación económica del país". Pero el 'conseller' no dice ni una palabra sobre los riesgos que tiene la pérdida del Q3 después de haber sido informado de ellos por el comité. El anuncio del A1 puede despejar el camino para que la Generalitat concrete las ayudas que dará a Seat en los próximos años, que según algunas fuentes pueden superar los 400 millones incluyendo la aportación del Gobierno central. La inversión de más de 300 millones que hizo Audi para adaptar la planta del Baix LLobregat a la producción del Q3, que comenzó a mediados del 2011, también recibió ayudas públicas.