FICHAJE EN WASHINGTON

Supersueldo del Banco Mundial para una sobrina de Guindos

Beatriz de Guindos representa a España en el organismo y ganará 14.000 euros netos al mes

Beatriz de Guindos, sobrina del ministro de Economía.

Beatriz de Guindos, sobrina del ministro de Economía.

RICARDO MIR DE FRANCIA / WASHINGTON

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Tras su sonada renuncia a uno de los cargos más importantes en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), Beatriz de Guindos ya ha encontrado el acomodo que buscaba fuera de España. La sobrina del ministro de Economía, Luis de Guindos, se ha incorporado esta semana al organigrama del Banco Mundial en Washington, donde representará a España como directora ejecutiva suplente en la Junta Directiva, una posición remunerada con más de 211.000 dólares anuales libres de impuestos, el equivalente a unos 14.000 euros netos al mes. Ayer mismo se presentó a sus nuevos compañeros.

"Aunque espero que podamos conocernos personalmente en las próximas semanas, no quería dejar de saludaros y ponernos a vuestra disposición en lo que podamos ser de ayuda", escribió Guindos (Beatriz) en un correo electrónico al que ha tenido acceso este diario.

En la Junta Directiva del Banco Mundial, España está agrupada junto a México, Venezuela y los países centroamericanos. La silla rotatoria de este grupo la ocupa un director ejecutivo, actualmente venezolano, y el resto de países tienen un director suplente, el cargo asignado a Guindos a propuesta del Gobierno.

Polémica

La antigua subdirectora de Industria y Energía en la CNMC se vio envuelta en la polémica hace poco más de un año. Por entonces, fue ascendida al cargo de directora general de Competencia, uno de los puestos de mando en la agencia encargada de regular la energía, las telecomunicaciones o el transporte y garantizar la libre competencia.

Al ser un organismo «independiente del Gobierno», el nombramiento de la sobrina del ministro causó un enorme revuelo en la CNMC y, un día después, Beatriz Guindos renunció al cargo para evitar sospechas de nepotismo.

Esas sospechas se agravaron porque su puesto de subdirectora de Energía lo iba a ocupar Micaela Arias-Cañete, la hija del ahora comisario de Energía europeo, Miguel Arias Cañete. Tras el fiasco, Beatriz de Guindos quiso perderse de vista y ha acabado en el Banco Mundial.