La lacra de las apuestas

El lado oscuro del balón

Antonio Conte.

Antonio Conte.

RAÚL PANIAGUA
BARCELONA

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En 1994, días después de marcarse un autogol contra EEUU que supuso la eliminación de Colombia del Mundial, Andrés Escobar fue asesinado en las afueras de una discoteca. Le pegaron seis tiros a bocajarro. Aunque jamás se comprobó judicialmente, las investigaciones vincularon el homicidio a las mafias de apuestas. Ese tanto hizo perder unas cantidades monstruosas de dinero a un grupo de narcotraficantes. Las apuestas siempre han existido, pero algo ha cambiado. El auge de internet ha multiplicado su influencia, con la participación incluso de los propios deportistas.

En un congreso celebrado en Zúrich en el 2008, la FIFA alertó de que las apuestas ilegales, concentradas en Asia, suponían el mayor peligro para el fútbol, por encima del dopaje. Las mafias mueven cantidades ingentes de dinero para sobornar árbitros, dirigentes y deportistas. Los arreglos, que empezaron en Taiwán, China y Singapur, se han expandido, como ya preveía el investigador canadiense Declan Hill, autor del libroEl arreglo, el fútbol y el crimen organizado,publicado en el 2008.«El fútbol corre serio peligro. Los hombres que han destruido varios campeonatos en Asia están llegando a Europa», vaticinó. A Europa y a todo el mundo.

Las apuestas ilegales han tenido relieve en muchos deportes, como el hockey sobre hielo y el tenis, pero el fútbol siempre da una mayor notoriedad. Ya había habido casos aislados en Alemania, Turquía, Rusia o Finlandia, pero poco a poco los escándalos son mayores. Basta recordar las detenciones de la fiscalía de Cremona el pasado mes de mayo, justo antes de la Eurocopa, lo que tuvo un tremendo impacto en Italia, un país que ya había vivido el fraude delMoggigateen el 2006. El último escándalo dejó al lateral Criscito fuera de la convocatoria del torneo de Polonia y Ucrania. Cesare Prandelli lo eliminó, mientras que el central Bonucci y el meta Buffon estuvieron en el punto de mira. El capitánazzurro, que gasta entre 100.000 y 200.000 euros mensuales en apuestas, supuestamente extendió cheques por un valor de 1,5 millones al titular de un estanco.

Cuatro meses de sanción

Buffon consiguió eludir cualquier tipo de castigo, lo que no logró Antonio Conte, el técnico de la Juventus, que cumplió una sanción de cuatro meses por su implicación en ese amaño de partidos cuando estaba en el Siena. La UEFA, la FIFA y la Interpol han unido sus fuerzas para combatir el problema. «Lucharemos juntos contra este cáncer», proclamó Gianni Infantino, secretario general de la UEFA.

También es reciente el escándalo que ha azotado al balonmano francés. Ocho jugadores del Mont-

pellier fueron arrestados por su posible vinculación con una trama de apuestas, entre ellos la estrella Nikola Karabatic y su hermano Luka. El pasado 12 de mayo, el equipo francés -que ya era matemáticamente campeón de Liga- se enfrentaba en Rennes al modesto Cesson Sevigné, contra el que cayó 31-28.

Las altas cantidades apostadas contra el Montepellier llevaron a la justicia a abrir una investigación. Nikola Karabatic, que no jugó el partido por lesión, sigue defendiendo su inocencia. Su novia, mientras, confesó haber apostado 1.500 euros a que el Montpellier se iría al descanso por debajo en el marcador. No se equivocó.