El Barça empequeñece al Siena y asalta el liderato europeo

Rabaseda, con 16 puntos, y Tomic, con 20, sobresalen en el convincente triunfo azulgrana

El pívot croata del F.C.Barcelona AnteTomic, intenta un lanzamiento frente al pívot italiano del Montepaschi Siena Luca Lechthaler.

El pívot croata del F.C.Barcelona AnteTomic, intenta un lanzamiento frente al pívot italiano del Montepaschi Siena Luca Lechthaler. / ms

LUIS MENDIOLA / Barcelona

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Definitivamente, elBarçase siente a gusto con el traje europeo. Volvió a demostrarlo este jueves, al salir fortalecido de un partido que temía por la visita del líder del grupo, el Montepaschi Siena, por la ausencia de Navarro, por la posible recaída de Sada (con lumbalgia) si forzaba. En fin, por ese perfil irregular que le acompaña desde que se inició la temporada. Por lo que se vio en la cancha no había nada que temer. El Barça empequeñeció alSiena(85-66) y se adueñó de la primera posición del Top 16 en un brillante encuentro de Tomic y en una espléndida actuación de Rabaseda, el indiscutible protagonista de la noche con 16 puntos en 17 minutos, y una impecable serie de 4 de 4 en triples.

Se reivindicó el Barça acabando con la imbatibilidad de los italianos en la segunda fase de la Euroliga y sobre todo se reivindicó Rabaseda, un jugador de la casa por quien el Palau siente debilidad, y que ayer mostró parte del potencial que trajo de nuevo a casa al alero de Ripoll tras una etapa corta en Fuenlabrada. Sin precipitarse, aprovechando su momento, Rabaseda fue creciendo en el partido de la misma forma lo hicieron sus estadísticas. Probó un triple, luego el segundo, luego finalizó un alley-oop y a partir de ahí se sintió el amo de la noche (anotó sus seis tiros) aunque Pascual no le regaló ni un minuto de más, estricto como es siempre con su plan de juego. A cambio, como premio, lo sentó a falta de un minuto para que recibiera la merecida ovación de la grada, mientras en el banquillo, Ingles (2 puntos en 23 minutos) sigue viendo cómo se le escapa la oportunidad, más ahora que ha aterrizado Oleson para reforzar al equipo en la fase clave de la Liga.

Si hay que quedarse con una imagen más o menos aproximada de lo que debería ser el Barça esta temporada, calibrando todo su potencial, esta se acercaría a lo que se vio ayer frente al Montepasschi Siena. No se entiende que el equipo haya navegado por la Liga Endesa sin apenas consistencia, viendo cómo pasó ayer por encima de la escuadra italiana, que se presentó en el Palau como líder de grupo, como el máximo anotador del torneo (promediaba 85 puntos y se quedó en 66) y se fue convencido de que se encuentra a bastante distancia del equipo de Xavi Pascual.

El Siena fue un equipo frágil. Un líder sin demasiados argumentos, más que las acciones individuales de su estrella, Bobby Brown, el mejor anotador de la Euroliga, a quien el Barça ató en corto y solo disparó sus números (19 puntos) en el intrascendente tramo final. Al menos esa es la imagen que dio ayer el equipo italiano en el Palau, desfigurándose por completo en el segundo cuarto, en el que los azulgranas llevaron las diferencias hasta los 19 puntos (48-29), cerrándole la puerta a cualquier tipo de sorpresa.

DEFENSA SOLVENTE

El Barça construyó su triunfo con facilidad. Mucha más de la prevista. Buena parte del mérito fue de la defensa azulgrana, que mostró ese perfil de solvencia que suele acompañarle en la competición europea y propició varios robos que supusieron canastas fáciles de contrataque. Pero también de un encuentro sin demasiados errores, casi ninguno.

El equipo de Pascual controló el rebote, movió bien el balón y estuvo muy acertado al encarar la canasta. Maceró el partido el Barça con los balones interiores a Tomic (impecable nuevamente a nivel ofensivo) y Jawai castigando la defensa italiana. Pero también resultó efectivo el equipo azulgrana desde las penetraciones de Huertas, y el acierto exterior de Jasikevicius (cada vez más lider sobre la cancha) y Rabaseda.

Eso provocó que la rendición del Montepaschi llegara antes de tiempo, incapaz de aguantarle el paso a su rival, y también que el Barça se refuerce anímicamente a menos de una semana de la Copa y de jugarse el primer título de la temporada.