Una apuesta por el comercio de barrio y la sostenibilidad

Por segundo año consecutivo, el Ayuntamiento de Barcelona lanza la campaña 'L’autèntic Paper del Nadal' con el objetivo de incentivar la compra de regalos en comercios de proximidad de la ciudad y promover los envoltorios sostenibles. Para conseguirlo, se van a situar, desde el 15 de diciembre y hasta el 5 de enero, 15 casetas de madera, en distintos puntos de Barcelona, en las que mediante la entrega de un tíquet de compra de una tienda del barrio se envolverá el regalo en papel ecológico en la misma caseta; y, mediante la entrega de dos tíquets de tiendas diferentes, se podrá escoger un envoltorio de ropa reciclada, inspirada en la tela tradicional japonesa 'furoshiki'. El horario de atención de las casetas es de 11.00 a 14.00 horas y de 17.30 a 20.30 horas, los días 15, 16, 17, 22, 23, 24, 28, 29 y 30 de diciembre, y el 3, 4 y 5 de enero.

Del 15 de diciembre al 5 de enero habrá 15 casetas repartidas por toda la ciudad

La iniciativa surgió durante la campaña de Navidad del 2016, cuando la Direcció de Serveis de Comerç lanzó una prueba piloto de apoyo y promoción al comercio de proximidad. Se instalaron diez casetas en diez ejes comerciales, una por distrito, con la intención de darle continuidad en el futuro. Los números del pasado año certificaron el éxito de la campaña, con más de 10.800 regalos envueltos en papel ecológico y más de 1.800 regalos envueltos con ropa reciclada.

RESPONSABILIDAD

La campaña pretende conseguir unas Navidades más sostenibles, donde todos seamos corresponsables mediante nuestras elecciones de compra. Adquirir los regalos en el barrio ayuda a las buenas prácticas ambientales, evitando el uso del coche y comprando en tiendas de comerciantes que refuerzan la vida en los barrios. Unas prácticas que van acompañadas de los envoltorios que pone a disposición de los vecinos el Ayuntamiento de Barcelona con papel de Navidad 100% ecológico y con 3.000 envoltorios de ropa reciclada repartidos por la ciudad.

Precisamente la idea de la ropa reciclada surge de la Cooperativa Tarpuna y ha sido producida por la Fundación Pare Manel y el Centre Especial de Treball (CET) Estel Tàpia, poniendo en valor la sostenibilidad social, con la confección de las piezas de ropa por parte de colectivos en situación de vulnerabilidad social e intelectual. “La iniciativa nació hace tres años con la campaña InfinitLoop, hoy llamada UnTresor, en la que desde Tarpuna colaboramos con las fundaciones Pare Manel y el CET Estel Tàpia dando oportunidades a personas en riesgo de exclusión social con una iniciativa sostenible. El año pasado colaboramos con el Ayuntamiento de Barcelona y fue un éxito. Pero más allá de centrarse en los resultados, hay que solventar errores y trabajar para que el proyecto se mantenga en el tiempo. Es importante que se convierta en una práctica implícita a la Navidad y que se sumen otros ayuntamientos, e incluso, entidades privadas”, explica Xosé Pérez, coordinador de las iniciativas de fabricación social en la Cooperativa Tarpuna.

Los envoltorios de tela están confeccionados por personas en riesgo de exclusión social

Barcelona tiene 22 núcleos comerciales con una oferta plural y de calidad y el comercio es uno de los sectores estratégicos de la ciudad, a nivel económico y ocupacional, pero también por su papel integrador y cohesionador, vertebrando y dinamizando barrios. La metrópolis tiene un comercio de proximidad singular, innovador y culturalmente diverso.

Fomentar la compra en el barrio, mediante iniciativas como el papel de Navidad ecológico, es clave para mantener un modelo de ciudad sostenible y responsable. “Hay que replantearse qué Navidad queremos. Hay muchas formas de celebrarla. Sin duda, nosotros apostamos por una Navidad sostenible y de proximidad. Hay que abandonar la idea de comprar lo más fácil y plantearse nuestros regalos desde un valor añadido más allá del precio. Pensar que si compramos en el barrio ayudamos a hacer una ciudad más sostenible, pero también de proximidad. Los envoltorios son un granito de arena más: por ejemplo, el nuestro está formado por ropa reciclada y quién lo recibe puede reutilizarlo como envoltorio otra vez”, concluye Xosé Pérez.