• Lunes 19 abril 2021, 12:14 h

elPeriódico.com

Regístrate | Iniciar sesión

DEPORTE

No quiero ser árbitro de fútbol

Viernes, 13 de febrero del 2015 Federico Sainz (Barcelona)

No soy árbitro ni quiero serlo. No entiendo cómo pueden serlo. Puede que algunos no conozcan el reglamento en profundidad, puede que otros lo interpreten erróneamente, pero dudo de que lo apliquen tendenciosa y perversamente. Se equivocan. Y también aciertan, como los jugadores, como todos. No es sencilla su labor, de decidir en un instante jugadas que a veces no son fáciles de descifrar ni en la pantalla del televisor. Sin embargo, se les juzga con absoluta intolerancia, se les censura sin un mínimo de indulgencia y se les demoniza con bajeza.

El ejemplo de las categorías profesionales se proyecta también a las categorías de aficionados y formativas donde si los jugadores, muchos de ellos niños, se muestran considerados, no sucede lo mismo con sus progenitores, pésimo modelo pedagógico en sus invectivas recurrentes hacia los colegiados, a los que obsequian con todo tipo de sarcasmos desde su supina sabiduría: «No tienes ni idea», «Dedícate a otra cosa» o «Te han regalado el título» son algunos de los enunciados más amables que reciben de licenciados en el reglamento arbitral, ya sean amas de casa, profesores, conductores, policías o abogados. Todos ejercen la potestad del menosprecio, la burla, el vilipendio, la desconsideración más grosera e infame. Porque ellos siempre tienen la culpa, porque no tienen ni idea, porque son inútiles. Sean valientes y díganselo en la calle, cuando acabe el partido. Si no es así, estén callados en la grada. 



Si quiere debatir sobre este tema, escríbanos aquí

EL PERIÓDICO publica opiniones, réplicas y sugerencias de interés general, respetuosas hacia las personas e instituciones. Las cartas enviadas podrán ser extractadas. Aun así, resulta imposible publicarlas todas. Para publicarlas, EL PERIÓDICO se reserva la posibilidad de pedir datos adicionales como DNI, domicilio y teléfono con el fin de contrastar su contenido y la identidad del autor. No se mantendrá correspondencia por correo electrónico ni se atenderán visitas o llamadas telefónicas sobre cartas o comentarios no publicados en cualquiera de los soportes de EL PERIÓDICO.
QUEJAS: Los lectores pueden expresar sus quejas al diario o bien al Consell de la Informació de Catalunya (CIC). Al CIC solo cuando consideren que se han vulnerado los principios recogidos en el Código Deontológico, por el tratamiento que dan los medios informativos sobre los diferentes temas. Pueden dirigirse al Consell de la Informació de Catalunya llamando al 93 317 19 20.