Quedé estupefacto e indignado al leer la noticia de que el Ayuntamiento de Barcelona quería sancionar a una de las librerías más exitosas de la ciudad, la Nollegiu de Poblenou, por una pizarra de 90x65 centímetros que sirve para escribir, con tiza y con una letra preciosa, frases que incitan a todo lo contrario de lo que dice el nombre de la librería. Parece ser que a un vecino, infiel al nombre de la calle donde vive (Amistat), le molestaba esa pizarra situada en su lado de la puerta de la librería. Hay personas para todo pero la administración más cercana al ciudadano debe poner sobre todo sentido común. Si se llega a sancionar esta librería, el Ayuntamiento habrá puesto el listón de las sanciones muy bajo. Seguro que si paseamos por Barcelona encontraremos artefactos mucho mayores que esta pequeña pizarra de Nollegiu y no son multados, o encontraremos a automóviles de la gama Mercedes, Audi, BMW (frente a la iglesia de San Ot de Pedralbes) durante los horarios de misa los fines de semana, ocupando aceras, carriles de la calle de doble sentido sin que nunca haya un guardia urbano.
Si quiere debatir sobre este tema, escríbanos aquí
Envía una carta del lector, opina sobre la actualidad y haznos llegar testimonios, denuncias y sugerencias para publicar en la edición impresa y en la web.
MOVILIDAD - Alessandro Malfatti (Barcelona)
SERVEIS - Enric Alfonso (Salou)
BARCELONA - José María Mateo (Santa Coloma)
ACTUALIDAD - Pablo Fuentes (Valladolid)
POLÍTICA - Antoni Tort (Barcelona)