Consellera Rigau, después de leer la noticia sobre la entrevista personal que deberán superar los alumnos que quieran acceder a los estudios de Magisterio como medida para mejorar la calidad del profesorado, permítame añadir otras medidas que, seguramente, ayudarían a la formación de los futuros maestros. Antes que nada, pidamos una nota media más alta que la actual para acceder a Magisterio y bajemos la ratio alumnos-profesor en las aulas. Después, mejoremos la calidad y capacidad de parte del profesorado que los alumnos de Magisterio se encuentran en muchas universidades. En caso de que desde la Conselleria sea difícil encontrar formadores de nuestros futuros educadores suficientemente capacitados, permítame sugerirle contratar maestros en activo, con años de experiencia, que están dando muestras de muy buenas prácticas en sus aulas y escuelas y que podrían aportar altos niveles de didáctica, innovación y actualización pedagógica en la formación de los futuros maestros. Tercero, seamos más exigentes con los alumnos de Magisterio, serán los futuros educadores de nuestros niños, pero ofrezcámosles también una buena formación, a la altura de lo que luego les exigiremos. Aplicar estas medidas supondría perder matrículas y una importante inversión económica por parte de la Generalitat, pero ¿queremos realmente mejorar la educación en nuestro país o simplemente ir poniendo parches?
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