Fui a la delegación de Hacienda en Mataró, y lo primero que hice al llegar fue preguntar al señor que estaba en la entrada vigilando el arco (por donde te hacen pasar "por seguridad"): "Por favor ¿tienen lavabos?". Su contestación fue educada: "No, señor, no hay lavabos para el público". Yo, también con educación, le dije que escribiría una carta a EL PERIÓDICO, y él me respondió, esta vez con moderada educación, que era libre de hacer lo que me diera la gana.
¿Es normal que un ente público que gestiona el erario público carezca de lavabos? Para el público, claro. No creo que el contribuyente se enfadase si se instalaran WC para las decenas y decenas de personas que tienen que esperar su turno para que los llamen, teniendo en cuenta que a la sala de espera llegan ancianos, embarazadas, madres con niños y con cochecitos, minusválidos... Y que en cualquier bar o restaurante es obligatorio que los haya, si no uno, dos y a veces hasta tres: uno para las señoras, otro para los caballeros y otro adaptado para minusválidos.
Esta queja va dirigida al ministro de Hacienda. Señor Montoro, seguro que en su despacho no le falta uno (para usted solo). ¿Instalado con el dinero de quién?
Si quiere debatir sobre este tema, escríbanos aquí
Envía una carta del lector, opina sobre la actualidad y haznos llegar testimonios, denuncias y sugerencias para publicar en la edición impresa y en la web.
MOVILIDAD - Alessandro Malfatti (Barcelona)
SERVEIS - Enric Alfonso (Salou)
BARCELONA - José María Mateo (Santa Coloma)
ACTUALIDAD - Pablo Fuentes (Valladolid)
POLÍTICA - Antoni Tort (Barcelona)