Jueves, 18 de diciembre del 2014 Ionel Mirea (Cornellà de Llobregat)

En respuesta a la teniente de alcalde Emilia Briones (Perros en Cornellà, 15 de diciembre), llevo cinco años viviendo en esta ciudad y ni yo ni mi can nunca hemos tenido un solo problema con nadie, excepto con el ayuntamiento. Señora Briones, mi experiencia me dice que o bien los 600.000 euros que usted afirma que se han gastado están mal gastados o esa cifra dista de la realidad, ya que dejan los pipicanes con charcos, malolientes y en deplorables condiciones. Además, vemos cómo agentes de la Guardia Urbana de paisano sancionan a altas horas de la madrugada a los que llevamos perro por minucias como "pisar el césped" o "soltarlo para lanzarle la pelota". Estas sanciones se dan a las puertas de los pipicanes, ya que a veces no podemos ni entrar en ellos por su estado.

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