Domingo, 19 de abril del 2015 Marta Perxachs (Blanes)

El uso de las redes ha supuesto que la vida privada sea pública. No me refiero tan solo al conocido postureo, sino a cuestiones de más trascendencia. Cuando se sube información a Facebook, estos datos privados ya no se podrán borrar y cualquiera puede usarlos. Los efectos negativos del mal uso de las redes afectan a campos hasta hace poco insospechados, como el llamado currículum en Facebook: muchos empresarios buscan en internet los perfiles de la persona a la que se quiere contratar, ya que el perfil personal contiene una gran cantidad de información biográfica. Un joven que estudia para ser profesor sale con los amigos, en aquella fiesta se toman fotografías y sin conciencia se suben a Internet. Estas fotografías ya quedan en la nube virtual, y a este joven, ya profesor, siempre se le puede decir algo por esa fotografía de tiempo atrás. ¿Cómo se puede solucionar este riesgo? Un pequeño grado de alfabetismo virtual no sería mala idea. 

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