La congelación de las tarifas del metro peligra

El consejo de Administación de la Autoritat del Transport Metropolità aprobará el próximo 28 de diciembre las nuevas tarifas de los transportes públicos del área de Barcelona. Y hasta ese mismo día estará en peligro la posibilidad de mantener la congelación de tarifas que ayuntamiento y Generalitat pactaron el año pasado, y que mantuvo, desde la rebaja de 10,30 euros a 9,95 del año 2015, la tarjeta T-10 por debajo del umbral psicológico de los 10 euros.

El pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha reclamado, a propuesta de Barcelona en Comú y con los votos favorables de ERC, PdeCat, PSC y Ciutadans, que el Gobierno central recupere su nivel de aportaciones delperiodo 2006-2011 y aporte 148 millones de euros, con un incremento de 40 millones, para poder mantener la estructura tarifaria sin cambios. Con todo, el objetivo a medio plazo es que el Gobierno vuelva a aportar anualmente 175 millones de euros, frente a los 108 actuales.

Oportunidad o justificación

La iniciativa es, para el gobierno municipal, una última oportunidad para evitar el aumento de precio del transporte público. Para el PP, que se ha abstenido como la CUP, pero también para el grupo municipal socialista, que pone el mantenimiento de las tarifas como una de las condiciones para pactar los presupuestos, es en cambio un simple gesto para poder justificar, tras una previsible negativa, el incremento previsto en los próximos. El presidente del grupo popular, Alberto Fernández Díaz, ha reprochado que el gobierno municipal "ha esperado a que pasaran las elecciones para anunciar un incremento de las tarifas", sin haber realizado ningún gestión efectiva a lo largo del año. 

La concejala de Movilidad, Mercedes Vidal, ha recordado que el Ayuntamiento consiguió incrementar laaportación del Estado en 10 millones de euros, mantener la congelación de tarifas, invertir seis millones de euros en la mejor de la red de autobuses, recuperar los buses de barrio en domingos y festivos, hacer frente a un aumento del número de pasajeros y cerrar los convenios de metro y bus "con costes que no estaban previstos", pero considera insostenible el esfuerzo que ha hecho el Ayuntamiento de Barcelona para compensar la falta de compromiso presupuestario del Estado.  

Según datos de su grupo municipal, las aportaciones al sistema tarifario integrado de la AMB se han incrementado un 21,8% del 2010 al 2017 (de 94 a 114 millones de euros), las del Ayuntamiento un 86,7% (de 73 a 136 millones) y las de la Generalitat un 26,4% (de 285 a 360 millones), mientras las del Estado han disminuido en un 45,8% (de 200 a 108 millones).

El acuerdo con Puigdemont

El año pasado un acuerdo entre el presidente de la Generalitat Carles Puigdemont y la alcaldesa Ada Colau hizo que ambas administraciones asumiesen un sobrecoste de 20 millones de euros para mantener las tarifas congeladas. la billete juvenil ampliaría un año más la cobertura gratuita de bus y metro que ya ofrece actualmente.