El riesgo de pobreza baja en Barcelona y sube en el resto de la AMB

La Encuesta de Condiciones de Vida en el 2016 en el Área Metropolitana de Barcelona aporta datos que apuntan a que la reactivación económica y la reducción del paro han tenido como efecto una disminución de las diferencias salariales en los 36 municipios que forman el entorno metropolitano en los últimos cinco años. Pero la encuesta también revela que el riesgo de pobreza seguía siendo elevado en el 2016 y muy superior en el resto del Área Metropolitana que en Barcelona, cuando en el 2011 ese riesgo amenazaba en porcentaje a más población en la capital catalana que en los otros 35 municipios.

La encuesta, presentada este miércoles por la teniente de alcalde de Urbanismo y vicepresidenta de Planificación Estratégica de la AMB, Janet Sanz, fija la renta anual neta media por hogar en Barcelona en 34.981 euros; la del resto del AMB en 32.330 euros, y la del AMB en su conjunto en 33.724 euros. Por persona, la renta anual era en el 2016 de 15.685 euros en Barcelona, de 12.530 euros en el resto de la AMB y de 14.073 euros en el conjunto del área.

Riesgo de pobreza

El estudio indica que un 18,4% de la población de los municipios del AMB, 3,2 millones de personas, se encuentra en riesgo de pobreza, es decir, cuenta con una renta disponible inferior al umbral del riesgo de la pobreza, que se fija en el 60% de la mediana de ingresos. Pero si se observa solo el caso de Barcelona, el riesgo de pobreza afecta a un 15,4% de la ciudadanía, en tanto que en el resto de municipios de la AMB es de un 21,3%. Hace cinco años, la situación era distinta.

En el 2006, el riesgo de pobreza era de un 20,1% en Barcelona, por encima del 19,8% del resto de municipios del Área Metropolitana. En el 2011, el porcentaje subió a un 20,3% en la capital catalana y bajó una décima en el resto de localidades, hasta el 19,7%. En el 2016, el riesgo de pobreza era en Barcelona del 15,4% y en el resto de la AMB, del 21,3%. La mejora de la situación ha sido, pues, considerablemente más intensa en Barcelona.

Si se observa la situación empleando el índice AROPE, que además de la renta contempla el nivel de ingresos, la privación material en diferentes apartados y la intensidad de trabajo por hogar, el riesgo de pobreza era el año pasado del 19,8% en Barcelona y del 23,5% en el resto de la AMB.

El coste de la vivienda

Otro de los datos relevantes de la encuesta atañe a la vivienda. Después de los innumerables dramas familiares que causó la oleada de desahucios por impago de hipoteca en los primeros años de la crisis, ahora es el alquiler el que golpea a muchos hogares, con aumentos de renta que resultaban impensables hace tan solo tres años. El sondeo hecho público por la AMB revela que en el 2016 un 51,7% de las familias de los 36 municipios que la forman y que viven de alquiler destinan más del 40% de sus ingresos a costes asociados a la vivienda. Entre la población de 16 a 34 años, los gastos por domicilio subieron, entre el 2006 y el 2011, del 22,9% al 30,8%.