Turistas locos por el 'shopping' en Barcelona

El mejor termómetro del gasto del turista de fuera de la Europa comunitaria son los mostradores de devolución de 'tax free' en Barcelona. Allí guardan cola decenas de compradores de todo el mundo que han gastado más de 90,16 euros en artículos en una misma tienda, con opción a la devolución de las tasas, para que estas les sean devueltas. Ni la oficina de la plaza de Catalunya ni la situada en los bajos de Turismo de Barcelona habían vivido jamás tanta efervescencia, con un sorprendente primer puesto para los viajeros argentinos, seguidos por chinos, rusos, coreanos y estadounidenses en cuanto a gasto acumulado.

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En algunos casos, el incremento del dispendio va de la mano del auge de viajeros de algunas nacionalidades en el último año. Pero es imposible saber en qué medida ha aumentado el consumo real de los viajeros, porque los balances están influenciados también por la ampliación de horarios en la sede del consorcio, y de operadores en el subsuelo de la plaza de Catalunya, desde junio del 2016, lo que da más facilidades para cobrar los cheques. Y es que las tiendas que forman parte de programas 'tax free' -en productos y parafarmacia, nunca en servicios- entregan al cliente un cheque por el valor de las tasas que se le han aplicado y a las que tiene derecho a devolución, en el caso de países extracomunitarios.

Montse Arnau, responsable del programa Barcelona Shopping City de Turismo de Barcelona, explica que los propios operadores han hecho un esfuerzo para dar a conocer este servicio entre el comercio y los usuarios, que suelen aprovecharlo, ya que la devolución ronda el 15% de la compra. La especialista destaca que lo importante de ese retorno es que se vuelve a gastar en la ciudad. Y es que la compra se debe haber realizado con tarjeta de crédito, pero la tasa que se devuelve se entrega en dinero metálico y solo en euros, de forma que apenas nadie lo cambia a su moneda de origen. Prefieren darse un capricho.

Las transacciones, en cualquier caso, sirven para evaluar la fiebre del 'shopping' internacional desatada en Barcelona. Históricamente, los reclamos turísticos eran cultura, arquitectura, clima y gastronomía. Pero en los últimos años la capital catalana se ha situado con fuerza también como "un destino de compras". Tanto de gran consumo como de lujo, explica la experta.

La tabulación de la compra total, con países europeos incluidos -grandes clientes de Barcelona-, no resulta posible desde que las entidades bancarias dejaron de facilitar el dato de los gastos por nacionalidades en tarjetas de crédito, indican en Turismo de Barcelona. 

Perfil del consumo

El servicio de 'tax free', más allá de ser tentador para el cliente, permite conocer las particularidades de cada nacionalidad a la hora de comprar. Lo más sorprendente en lo que va de año es el ascenso meteórico de los viajeros argentinos, que ya son los primeros -entre los países extracomunitarios- en volumen conjunto de gasto, con casi cuatro millones de euros y un 577% de crecimento, según los datos del operador Global Blue. La razón es que hasta hace unos meses tenían importantes limitaciones de compra con tarjeta de crédito, que ahora se han flexibilizado. No compran artículos de lujo, pero sí hacen infinidad de compras de menor volumen. Son también primeros en cantidad de adquisiciones realizadas (12.076 con derecho a devolución de tasas hasta agosto). La mayoría de ropa de cadenas populares y complementos les resultan mucho más económicas que en su país.

Según Global Blue, por detrás, en gasto por países, se sitúan chinos, rusos -que vuelven a repuntar en afluencia y gasto-, coreanos, estadounidenses e israelís (que emergen con fuerza). En el caso de la cantidad de compras variadas que efectúan, los rusos son segundos, seguidos por coreanos, israelís, chinos y brasileños. 

En conjunto, esta vía de devolución suma en lo que va de año 4,13 millones de euros, un 94% más que en el mismo periodo del 2016, respecto a un gasto de todo este colectivo de más de 30 millones de euros. Cabe destacar que el gasto medio que se esconde tras cada cheque es de 432,24 euros. Es decir, que los viajeros vienen con hambre de tiendas.

Compra descentralizada

Otro dato curioso resulta de cruzar el gasto por nacionalidades y por volumen de compras, de modo que la lista resultante ofrece un 'top 10' de nacionalidades que más gastan por misma compra. Los vendedores ya pueden frotarse las manos cuando traspasa el umbral de su tienda un mauritano, cuyo valor medio de gasto cuando va a por su 'tax free' es de 801 euros. Le siguen los chinos, con 770 euros y adictos a las compras de lujo -para ellos y para satisfacer encargos realizados por familiares y amigos-, los viajeros de Kirguizistan y Uzbekistan, Panamá, EEUU, Hong Kong, Indonesia, Andorra y Taiwán. Algunos, obviamente, llegan esporádicamente a Barcelona, pero cuando lo hacen no reparan en gastos.

Arnau destaca también que este incentivo contribuye a descentralizar las compras, que se registran en comercios fuera del centro y con carteles que incitan al 'tax free'. Las cifras generales han crecido todos los meses de este año, aunque los meses más altos han sido mayo, julio y agosto. Las puntas, la coincidencia con congresos potentes o eventos destacados.