MEJORA URBANÍSTICA PENDIENTE

Los comerciantes de la Diagonal rechazan la reforma 'low cost'

Afirman que la única forma de dinamizar la zona es ampliando las aceras laterales

PATRICIA CASTÁN
BARCELONA

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más que un ajuste de cinturón, les suena a «tomadura de pelo». La opción planteada desde el ayuntamiento para mejorar la Diagonal eliminando las motos y bicis aparcadas de sus aceras centrales y reubicándolas provisionalmente en uno de los carriles laterales ha provocado rechazo frontal entre los comerciantes de la avenida. Esta reforma blanda no tendría, argumentan, ningún beneficio, ya que el paseo por el tramo central «no serviría» para dinamizar comercialmente la zona, víctima de unas raquíticas aceras laterales. La asociación Diagonal Centre lamentó ayer que el ayuntamiento siga sin mover ficha sobre la reforma «suave» que el colectivo propuso el año pasado y está presupuestada en unos 15 millones de euros.

La idea que se ha considerado en los últimos meses en el consistorio, como explicó este diario el pasado domingo, viene a ser como un remedio low cost para adecentar la zona mientras la crisis y las discrepancias municipales frenan una intervención definitiva. La intención sería despejar las zonas centrales de paseo bajando las motos y bicis a la calzada lateral, que se quedaría con un solo carril de tráfico. De ese modo, se liberaría zona de paso para el peatón, argumentan fuentes municipales. El único gasto de esta medida, de tipo temporal, sería la pintura de la señalización horizontal.

Pero la mera insinuación de esta idea ha enfurecido a los comerciantes a los que representa Marta Canut. «Es una vergüenza», insiste la presidenta, desde la convicción de que los barceloneses no pasearán por un eje central que quede alejado de los comercios, restaurantes y servicios de la calle. «La única solución es ganar aceras laterales», reitera. Estas pasarían de los 2,6 metros actuales de ancho a 10 metros, según el proyecto en el que han trabajado con supervisión municipal.

Canut pone como ejemplo de lo que sería un fiasco la situación que se ha vivido en la vecina calle de Tuset, donde las motos aparcadas bajaron a la calzada y el resultado no ha convencido a nadie, dicen. Sus vecinos reclaman una peatonalización.

REPRESALIA / Los comerciantes de la Diagonal empiezan a dar muestras de impaciencia sobre el futuro del vial, que está causando una evidente paralización comercial, con más oferta de locales vacíos que cualquier otra calle de primera línea de la ciudad. Por ejemplo, muchos de ellos se han negado a pagar su cuota correspondiente de las luces de la Navidad pasada. Teóricamente deberían sufragar el 50%, en alianza con el ayuntamiento. Pero los empresarios «están cansados» de esperar la reforma y de pagar tasas durante años sin recibir «ninguna inversión a cambio», opinan.