AMARRES DE LUJO EN EL LITORAL

CiU vuelve al pacto con el PP para aprobar la marina de megayates del Port Vell

Los vecinos y la oposición de izquierda reclaman que se paralice la instalación porque vuelve a alejar a Barcelona del mar

Uno de los grandes yates que se reparan en los talleres de Marina Barcelona 92, en el Port Vell, ayer.

Uno de los grandes yates que se reparan en los talleres de Marina Barcelona 92, en el Port Vell, ayer.

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El polémico plan para convertir el actual puerto deportivodel muelle de la Barceloneta en una marina exclusiva para megayates de lujo de grandes dimensiones ha sido aprobadodefinitivamente este jueves por la noche en la comisión deHábitat Urbano gracias al apoyo del PP al gobierno en minoría de CiU.

En las últimas semanas, ambos partidos han negociado algún cambio para atenuar el notable impacto en el litoral de una instalación que rechazan tanto los grupos de izquierda del PSC, ICV-EUiA y UpB, como laPlataforma Defensem el Port Vell que reúne a 35asociaciones de vecinos y entidades ciudadanas.

La plataforma ha reafirmado este jueves por la mañana su oposición al polémico planacusandoal gobierno de CiU de «gobernar de espaldas a las necesidades de la ciudad y al patrimonio marítimo, y de cara a unas inversiones que solo beneficiarán a unos pocos grupos empresariales». La instalación, se añade, volverá a "separar y alejar a la ciudad del mar" tras el camino de recuperación iniciado después de los Juegos Olímpicos del 92.

Cuatro representantes de laplataforma, Gala Pin, Xavier Moreno, Francesc Magriñà e Itziar González, han asegurado en una rueda de prensa en la Facultat de Nàutica que el plan especial «no está justificado por ningúninterés general» y en cambio da paso al uso «exclusivo y excluyente» de uno de los espacios emblemáticos del litoral de Barcelona.

En el acto han participado también los líderes de los tresgrupos municipales de izquierda. El socialistaJordi Martí dijo que "la privatización y el dejarse llevar por el mercado que implica el plan supone liquidar el puerto y el litoral como espacio público, cultural y de formación e investigación de Barcelona".

Para el ecosocialistaRicard Gomà "los grandes yates de lujo no son economía productiva sino especulativa" y pidió al alcalde Xavier Trias "un gesto democrático" para no aprobar el proyecto y abrirlo al debate. El republicanoJordi Portabella insistió en que "en el siglo XXI no pueden tomarse decisiones al margen de la opinión de los ciudadanos".

Modificaciones

Para la realización de la nueva marina, la concesionaria del ámbito,Marina Port Vell --comprada por Salamanca Group en el 2010--, se ha comprometido por escrito a incorporarmedidas exigidas por el consistorio en el programa de explotación que debe presentar a laAutoridad Portuaria de Barcelona (APB).

 La empresa ha cedido también en medidas referentes a la disposición de losbarcos, alejándolos del centro de la ciudad para evitar que hagan de barrera visual, pese a que la denominada lámina de agua no compete a la modificación de planeamiento que acabará aprobando el ayuntamiento.

En elmuelle de la Barceloneta que da al paseo de Joan de Borbó se colocarán preferentemente embarcaciones de un máximo de 60 metros de eslora, que no excedan los tres pisos de altura, y se establecen espacios intermedios entre los yates, excepto en plena ocupación por eventos excepcionales como el Salón Náutico, la Fórmula 1 y la Barcelona World Race.