UN AÑO DESPUÉS

Messi, suplente por una noche

"¿Cómo se lo dije? Eso lo guardo para mis memorias, si hubierámos perdido estaría aquí esquivando las balas", dice Valverde

Messi y De la Fuente, el entrenador de porteros del Barça, en el banquillo del Juventus Stadium.

Messi y De la Fuente, el entrenador de porteros del Barça, en el banquillo del Juventus Stadium. / periodico

Marcos López

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Salió Messi sonriendo por el túnel del Juventus Stadium. Iba cuchicheando con Gonzalo Higuaín, el delantero bianconero, tapándose  ambos los labios para no ser cazados por las cámaras. Iba Leo con el chándal de suplente, un chándal que no usaba desde hace un año en la Liga (15 de octubre del 2016) cuando salía de una lesión y se quedó en el banquillo. Un chándal que en Europa no utilizaba desde abril del 2013 cuando el difunto Tito Vilanova le hizo salir para que, cojo como estaba, ayudara al Barça a seguir adelante en la Champions. Y Leo, como es habitual, lo hizo, interviniendo en la jugada previa al decisivo gol de Pedro.

 Lo que no es habitual es que Messi "descanse", esa fue la palabra empleada por Valverde, en un partido grande. En Europa juega siempre; en la Liga, también. En realidad, había disputado 18 de los 19 encuentros de esta temporada. Y en los 18 completó los 90 minutos sin un solo segundo de descanso. Podía haber sido suplente ante el Leganés, pero Valverde decidió hacerlo en el duelo con la Juve.

Aplaudido en campo rival

"Messi está bien, pero tiene acumulación de partidos y preveíamos que el encuentro sería cerrado al inicio. Luego, se abriría más", aseguró el técnico azulgrana, capaz, y no lleva ni medio año en el Barcelona, de pactar y consensuar esa decisión. Sonrió Valverde cuando le preguntaron quien había dado el primer paso, consciente de que no era necesario airear "asuntos internos" del vestuario.

Hizo Valverde, que no lleva ni medio año en el Barça, algo que no habían osado hacer Guardiola, Tito, Tata o Luis Enrique: sentar al 10

Pero con Mestalla a la vuelta de esquina, el Barça juega el domingo en el campo del segundo clasificado de la liga, el entrenador abrió una vía innovadora en la gestión de la estrella. Una vía no explorada nunca, ni siquiera por Guardiola, Tito, Tata o Luis Enrique.

Sorprendió a todos, incluído a la propia Juve. Por eso, el público bianconero aplaudió la entrada del genio al césped. Sorprendió, por supuesto, a Allegri. Y hasta a sus propios compañeros cuando vieron al 10 sentarse en el banquillo del Juventus Stadium, junto a De la Fuente, el entrenador de porteros. «¿Cómo se lo he dicho a Messi? Eso lo guardo para mis memorias», bromeó el entrenador azulgrana, quien no quiso desvelar pacto alguno con la estrella.

"No hay que darle tantas vueltas, es algo natural. Pensamos que era un buen día para que Leo saliera en la segunda parte" (Valverde)  

"Son cuestiones internas, lo dejamos ahí. No vamos a desvelar todo. No hay que darle tantas vueltas, es algo natural. Pensamos que era un buen día", proclamó Valverde, recordando que ha "intentado limitar los riesgos" en un par de futbolistas. En el de Messi y en el de Jordi Alba, que también venía desgastado de su paso por la selección española. Pero ninguna medida tan trascendente como decirle a Leo que era suplente. Claro que es arriesgado dejar a Messi en el banquillo, es el mejor del mundo... Si hubiéramos perdido, estaría aquí esquivando las balas".