El Estudiantes entierra la vida en rosa del Barça (80-70)

El Barça Lassa culminó este domingo en una pista maldita como la del Movistar Estudiantes (80-70) una triste semana. Después de un prometedor inicio del proyecto de Sito Alonso, con cinco victorias consecutivas, en solo tres días los azulgranas han hincado la rodilla en Belgrado y en Madrid. El Divina Seguros Joventut, en cambio, no se salió del guion con el que ha iniciado la ACB: cuarto partido y cuarta derrota, esta vez en la pista del Herbalife Gran Canaria (94-69).

«Tenemos que aprender a jugar fuera de casa, tener más decisión en los momentos importantes y no cometer errores que nos penalizan mucho», analizó Sito Alonso después de un mal partido que el Barça no supo ganar en la primera mitad, pese al desacierto estudiantil, y que regaló en una horrible segunda mitad en la que solo anotó 25 puntos y en especial el último cuarto (9). Es la cuarta temporada consecutiva que el Barça sale derrotado en su visita a un Estudiantes que jugó de rosa en apoyo a la lucha contra el cáncer de mama.

Tres minutos y medio tardó Tomic en mover el marcador del Barça, aunque el conjunto madrileño no lo supo aprovechar. El 1 de 11 en triples del Estudiantes lo acompañó su rival con un 0 de 3 igual de deprimente. Despertó el conjunto catalán en el segundo cuarto impulsado por Heurtel, Vezenkov y Oriola, que llevaron a su equipo a anotar 34 puntos en ese parcial. Pero el Estudiantes, pese a que seguía errático en la línea de tres (2 de 17) no se fue muerto al descanso (36-45).

Landesberg, la pesadilla culé

Landesberg se echó al equipo madrileño a la espalda y protagonizó en exclusiva un parcial de 13-4 (49-49, m. 25) que exasperó a Alonso. El Barça logró frenar la sangría, pero encadenó fallos en ataque y ya no pudo volver a despegar en el marcador. De hecho lo que cambió el choque fue el acierto estudiantil. 

El equipo de Salva Maldonado había conseguido llegar vivo a los últimos cinco minutos (65-66) pese a su 4 de 27 en triples, así que en cuanto afinó la mirilla se llevó el partido. Cvetkovic devolvió la ventaja a los locales con un triple y otro de Brow llevó la ventaja local a siete puntos a 2-15 del final (73-66). Lejos de responder, el Barça se estancó en 9 puntos en el último cuarto y cedió la primera derrota y el liderato.

Homenaje a Oliver

No le fue mejor a la Penya en Gran Canaria, donde cosechó una nueva derrota, esta vez por una preocupante diferencia de 25 puntos. Diego Ocampo, técnico del Joventut, pidió tranquilidad tras la derrota. «Es importante no pensar en el año pasado ni en el futuro, sino trabajar en el día a día y tener tranquilidad para progresar a medio y largo plazo. Poco a poco iremos recogiendo los frutos», argumentó.

El partido empezó con un homenaje al exverdinegro Albert Oliver por sus 20 años en la élite, pero tras el salto inicial el protagonismo lo reclamaron Fischer y Eriksson. El alero sueco (23 puntos) llevó la batuta anotadora de los canarios, que en el tercer cuarto resolvieron un choque hasta entonces bastante equilibrado gracias a otro sueco, el joven pívot verdinegro Birgander, y el acierto de Sergi Vidal en momentos decisivos.

Un triple del badalonés nada más empezar el primer cuarto (41-40) hizo pensar en un desenlace igualado, pero Fischer tomó las riendas en el ataque local con seis puntos consecutivos (60-48, m. 26). La diferencia no hizo más que crecer hasta el final y un parcial de 11-0 en el inicio del último cuarto senteció a la Penya.