INFRAESTRUCTURA EN LA PICOTA

Presión metropolitana por el tranvía

Los plenos municipales de los municipios con Tram ya se han posicionado a favor de la conexión de las líneas

ERC y CiU han votado siempre 'sí' a la unión y solo se han abstenido en una ocasión en consistorios con vías

El Trambaix, en la avenida de la Diagonal. / FERRAN NADEU

Mientras Barcelona sigue con su comisión de estudio sobre la conexión del tranvía (este jueves se celebra la última sesión antes de presentar las conclusiones el 15 de febrero), los municipios del área metropolitana por los que pasa el Tram parecen tener mucho más claro su apoyo al proyecto. Y desde hace tiempo. De las ocho ciudades con vías (la capital catalana es la novena), Cornellà es la única que no ha abordado la cuestión en su pleno. Todas las otras (Sant Feliu de Llobregat, Badalona, Esplugues, Sant Just Desvern, L'Hospitalet, Sant Adrià del Besòs y Sant Joan Despí) ya se han posicionado a favor. Y lo que resulta más llamativo, con el voto favorable, en la mayoría de casos, de CiU (ahora PDeCAT) y ERC

Tanto la Generalitat como la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) resplandan el plan. El Govern, tanto el de Artur Mas como el de Carles Puigdemont, dejó en manos del consistorio la elección del mejor trazado para unir el Trambaix y el Trambesòs. En el caso del ente metropolitano, al margen de la redacción del estudio informativo presentado en junio del 2017, que dejaba claro que la mejor opción es la de conectar por la Diagonal y en superficie, su director, Pere Torresmandó en enero una carta a la teniente de alcalde Janet Sanz instándole a que se acelerara la decisión para poder iniciar los proyectos ejecutivos. 

Barcelona es diferente

El caso metropolitano es absolutamente opuesto al de Barcelona. Cornellà al margen, todos los consistorios dieron su apoyo al tranvía sin que ni tan siquiera se hubiera presentado el estudio informativo, es decir, sin que técnicamente quedara demostrado que era posible emprender la obra. El pionero fue L'Hospitalet, cuyo pleno abordó la cuestión en diciembre del 2015. El último fue Sant Adrià, en mayo del 2017. 

De todas las proposiciones aprobadas, solo tres expresan su deseo de que la unión se haga por la Diagonal (Sant Adrià, L'Hospitalet y Sant Joan Despí). El resto apuestan por "la conexión que determinen los estudios técnicos que se están culminando". Es decir, no citaban directamente la avenida pero esos estudios a los hacen referencia señalan en esa dirección. El resultado de las votaciones demuestra hasta qué punto los grupos municipales locales de un mismo partido funcionan como compartimentos estancos. La diferencia de pareceres respecto a lo que está sucediendo en el consistorio barcelonés es evidente.

En la capital catalana, el proyecto cuenta con el apoyo de Barcelona en Comú y el PSCPP y PDeCAT están en contra, sin ninguna pinta de que vayan a cambiar de opinión. Ciutadans sigue instalado en la duda pero parece decantado hacia el 'no' y la apuesta por la red ortogonal de bus. La CUP sigue exigiendo una gestión pública para aportar sus tres ediles a la causa, algo que solo puede suceder a partir del 2032ERC está entre dos aguas, pero conforme ha ido avanzando la comisión se ha ido mostrando cada vez más reacia al nos considerarlo prioritario. Por último, el concejal no adscrito Gerard Ardanuy (exCiU) da la sensación que podría acabar comulgando con la causa. 

'Pressing ERC'

El gobierno de Ada Colau sabe bien que sin Esquerra no podrá aprobar la propuesta. A ellos piensa dirigir toda la presión. Incluido el argumento de que sus colegas metropolitanos, menos los de Sant Joan Despí, donde se abstuvieron, han votado a favor de la unión del ferrocarril. Los independentistas incluso han llegado a incluirse en la parte impulsora del acuerdo. Sucedió en Esplugues, Sant Just Desvern (donde lo hicieron en solitario) y Sant Feliu de Llobregat. También los exconvergentes metropolitanos han dicho 'sí' al tranvía, con la única abstención de L'Hospitalet. 

La comisión municipal de este jueves abordará precisamente el impacto del ferrocarril en el área metropolitana. Para la semana que viene están previstas las conclusiones. A partir de ahí, tal y como avanzó la propia alcaldesa el martes en una entrevista en Betevé, ha llegado "la hora de la verdad", el momento del 'pressing ERC'.